Las puertas de las iglesias locales estarán abiertas para los estudiantes que, ante la falta de recursos, tienen dificultad para acceder a la educación a distancia que obligó la pandemia de Covid-19, informó ayer el Arzobispo Rogelio Cabrera López.
«He pedido a todas las parroquias, especialmente a las que están en las zonas con dificultades económicas mayores, a que den facilidad a niñas y niños para que no vayan a interrumpir sus clases, que el internet esté abierto para ellos y también las televisiones2, expresó monseñor.
La idea es que los templos comparta su wifi y, de acuerdo con sus características, los alumnos capten la señal en alguna zona cercana al aire libre. La iniciativa surgió por una petición de Pastoral Universitaria.
El lunes pasado arrancó el ciclo escolar 2020-2021 que, por su modalidad, resultó inédito.Poco más de 1 millón de estudiantes de nivel básico en Nuevo León iniciaron la experiencia de tomar las clases por televisión con el programa «Aprende en Casa II», de la SEP.
El jerarca católico señaló que se busca brindar en los espacios públicos de las parroquias las oportunidades de continuar con la preparación escolar que a veces no es posible realizar en los hogares.