El Congreso de Nuevo León eliminó el cobro del derecho que el gobierno del Estado aplica a los casinos y demás centros de juegos y apuestas por cada máquina que tienen en funcionamiento, recursos etiquetados para el tema de Seguridad.
El argumento es que el derecho no generó la expectativa de ingresos, ya que los dueños de los casinos y casas de apuestas retiraron las máquinas que no tenían en uso.
Eso, a su vez, afectó la proyección que se tenía de recaudación de esos recursos que iban destinados a los municipios para la Seguridad.
El dictamen deroga el apartado que reglamentaba los derechos por los servicios de Supervisión, Control y Expedición de Constancias de Ingresos a la Base de Datos de Máquinas de Juegos y Apuestas.
En la exposición de motivos, se señala que cayó drásticamente el cobro de los impuestos, es decir, quedó muy por abajo de lo esperado.
Se determina que falló la estrategia fiscal de recaudación para dotar a los municipios de más ingresos y que no se puede permitir que éstos se queden limitados en este actuar, pues es tanto como poner en riesgo las estrategias y planes de seguridad de los municipios.
En el debate, los legisladores de MC se opusieron, y votaron en contra.
La reforma a la Ley de Hacienda, impulsada por el PRI, el PAN y una diputada sin partido político, fue autorizada por mayoría de votos, en la sesión de este lunes.