A 32 años de la llegada del Huracán Gilberto a Nuevo León, ciudadanos recuerdan el trágico paso del fenómeno meteorológico también llamado ‘Huracán Asesino’.
Gilberto fue el huracán más intenso jamás observado en la cuenca del Atlántico y se convirtió en uno de los ciclones tropicales con mayor extensión de la historia; en un punto alcanzó a tener un área de 1,250 km.
El fenómeno meteorológico azotó Monterrey y su área metropolitana, con vientos muy fuertes, lluvias torrenciales y extensas inundaciones la madrugada del 17 de septiembre.
De acuerdo con reportes oficiales, alrededor de 200 personas perdieron la vida en cinco autobuses mientras cruzaban el río Santa Catarina, el cual se desbordó en su totalidad; 6 policías murieron al intentar rescatar a los pasajeros varados en los mismos.
Los residentes de Monterrey se quedaron sin electricidad y agua potable, y la mayoría de las líneas telefónicas se perdieron.
Un recuento final de víctimas del huracán Gilberto no es posible debido a que muchas personas siguen oficialmente como desaparecidas.
Gilberto fue el peor huracán en la historia de Jamaica y el ciclón tropical más destructivo en México. Debido a su impacto generalizado, los grandes daños y al número de víctimas, el nombre de Gilberto fue retirado en la primavera de 1989 por la Organización Meteorológica Mundial y fue el primer nombre que se retiró desde el huracán Gloria en 1985.