La Organización Meteorológica Mundial dio a conocer que el agujero de la capa de ozono que se ubicaba sobre el Ártico se cerró por completo a finales del pasado mes de abril.
«El agotamiento de la capa de ozono, el escudo que protege la vida en la Tierra de los niveles dañinos de radiación ultravioleta, alcanzo un nivel sin precedentes en grandes partes del Ártico esta primavera, la última vez que se observó un agotamiento de ozono igualmente fuerte en el Ártico fue durante la primavera de 2011» dijo Clare Nullis, portavoz de la mencionada organización.
El agujero fue causado por la presencia de clorofluorocarbonos que destruyen la capa de ozono en combinación con un invierno muy frío en la estratosfera que se ubica entre 10 y 50 kilómetros de altitud de la atmósfera.
La Organización Meteorológica Mundial explicó que el agujero de ozono se cerró en abril con el aumento de las temperaturas en la estratosfera y la afluencia de aire rico en ozono y agregó que la disminución de la contaminación del aire por la pandemia del COVID-19 no fue un factor determinante para lo que ocurrió con la capa de ozono.