Hong Kong Disneyland reabrió oficialmente sus puertas este jueves tras una importante caída en el número de casos de COVID-19 en el territorio semiautónomo chino.
Los usuarios tendrán que reservar su boleto con antelación y el parque, uno de los pilares de la vital industria turística de Hong Kong, tendrá una entrada limitada.
Se implantaron medidas de distanciamiento social, como evitar mezclar distintas familias en las filas, restaurantes, atracciones y tiendas, además de aumentar la limpieza y desinfección.
Los visitantes tendrán que someterse a controles de temperatura a la entrada y deberán llevar mascarilla durante toda su estancia en el recinto, a excepción de cuando estén comiendo o bebiendo.
Hong Kong, una ciudad de 7.5 millones de habitantes, ha registrado apenas mil 120 casos y cuatro muertes por COVID-19, pero el impacto en la economía del centro financiero que depende de los viajes internacionales y de visitantes procedentes de China, ha sido severo.
La mayoría de los visitantes de fuera del territorio siguen teniendo prohibida la entrada y Disneyland indicó que pedirá a cualquiera que haya viajado a fuera de Hong Kong en las dos últimas semana que reprograme su visita.