En las pasadas elecciones, casi un tercio de los ciudadanos registrados para votar en Nuevo León provenían de Tamaulipas, San Luis Potosí y Veracruz, un hecho que confirma el alto volumen de migración nacional que registra el estado.
Según el Inegi, Nuevo León es la cuarta entidad mexicana con mayor crecimiento poblacional. Lo superan Quintana Roo, Querétaro y Baja California Sur, todas caracterizadas por sus atractivos económicos, laborales, educativos o de calidad de vida.
Mientras a nivel nacional el crecimiento de la población fue de 1.2% anual entre el 2010 y el 2020, en N. L. la tasa alcanzó 2.3%, es decir, casi el doble.
«Hay evidencia de cuánta población absorbemos, por eso nuestra premisa ha sido que si le asignas más recursos a Nuevo León le ayudas más al país», aseguró en una entrevista reciente con ABC Noticias el secretario estatal de Finanzas, Carlos Garza.
«Caminas tres cuadras y vas a encontrarte una obra nueva, caminas dos kilómetros y va a haber un proyecto nuevo; evidentemente hay mucho empleo y eso ayuda a que tengamos capacidad de absorber a gente que viene de otros estados; afortunadamente Nuevo León ha tenido esta capacidad», expresó el funcionario.
La entidad ha logrado una de las más rápidas recuperaciones en ocupación laboral, después del bache de la pandemia, y por décadas se ha mantenido como una de las más prósperas del país, pero este acelerado crecimiento poblacional también plantea sus desafíos.