Para los colectivos y familiares de personas desaparecidas, la búsqueda que se realiza en la presa de La Boca, es una esperanza de conocer el paradero de a quienes esperan encontrar con vida, aunque también les daría paz tener la certeza de saber qué fue de ellos.
A pesar del sol, lo retirado del sitio y la temprana hora, portando un pin con la foto de su hija Ana Larissa Rayas, quien este día cumple 12 años de haber desaparecido de afuera de su casa en la colonia Mitras Norte de Monterrey, la señora Ana Francisca Rayas Guevara se unió a las acciones.
Junto a otras madres integrantes del colectivo Eslabones Nuevo León por los Derechos Humanos, así como han visitado otros sitios de búsqueda como “El Tubo” en Hidalgo o “la cancha” de Escobedo, se sumaron al despliegue de la Fiscalía de Justicia y la Comisión Local de Búsqueda en la Presa La Boca en Santiago.
“Ana Larissa hoy está cumpliendo 12 años del día que se la llevaron de afuera de mi casa y nos estamos sumando a la búsqueda esperando que haya un resultado. Tenemos que buscar, nosotros queremos encontrarlos vivos, pero ya habiendo estos hallazgos de aquí, allá o de dónde nos digan, tenemos que buscar”.
“Las personas con desaparecidos tenemos que alzar la voz para ser atendidos, porque al menos en mi caso ya son 12 años y no habido resultados de la desaparición de mi hija, y si no hablamos pues menos”, indicó Rayas Guevara.
Equipadas con sombreros para soportar los fuertes rayos del sol, cubrebocas por la pandemia, varas para tentar el terreno y banderillas para señalar los sitios de posibles indicios, las buscadoras recorrieron a pie junto a los agentes las distintas zonas del embalse en espera de obtener resultados.
Asimismo, la señora Roberta Rodríguez también espera tener información de su hija Alejandra Tamez Rodríguez quien el 24 de marzo de 2010, en plena crisis de inseguridad, tras ser invitada a una fiesta ya no regresó.
“Se dice que a lo mejor los trajeron aquí a la presa, se dicen muchas cosas, pero no hay certeza en la investigación. Igual buscamos con vida o sin vida y pues aquí estamos sumándonos para ver qué puede salir de aquí”, expresó de manera emotiva.
Junto a Yolanda Navarro coordinadora del colectivo quien busca a su hijo Luis Alberto Navarro desaparecido en Santiago en mayo de 2010, esperan que en esta oportunidad los mecanismos y la implementación de un equipo multidisciplinario y apoyo tecnológico, finalmente se obtengan resultados.