Todavía no termina de salir el sol, y la fila en las instalaciones de la Comisión Federal de Electricidad ya llegaba a la calle, debido a que, si no madrugan, nadie les ayuda. Los recibos con cobros exponencialmente elevados, largas filas y pocas fichas para las aclaraciones, a pesar de que abren a las 08:00 horas, obligan a los usuarios a formarse en una kilométrica fila desde las 05:30 horas en la delegación Lincoln de la dependencia del Gobierno federal.
Esto ocurrio en el módulo ubicado en la avenida Ruiz Cortines en Monterrey, donde los usuarios denunciaron que solamente se reparten 25 fichas para realizar aclaraciones, lo que ha provocado el hartazgo entre quienes tienen que madrugar para ser atendidos. María Acosta denunció que le llegó el recibo “alterado”, al pasar de mil a seis mil 500 pesos en el último bimestre, y al buscar una aclaración, le dijeron que se debía a una falla en las instalaciones, provocando que tuviera que dar otra vuelta en espera de una solución. Otro de los problemas es que los cajeros automáticos en la planta baja presentan fallas y solo aceptan pagos con tarjeta, mientras que para pagar en efectivo hay que armarse de paciencia y no tener alguna discapacidad, debido a que no hay accesibilidad universal en el inmueble
