Las condiciones del clima, la sequía y poco presupuesto han complicado la situación de Bomberos de Nuevo León en el combate a los incendios que se han intensificado en los últimos meses en el estado.
De acuerdo con el director de Operaciones de Bomberos de Nuevo León, Alejandro Zúñiga, tan sólo en el mes de marzo se atendieron 800 incendios y el pasado miércoles se atendieron 44 servicios, por lo que la situación trae fuertes problemas para la organización.
Esto ocurre ante presiones presupuestales que enfrenta la corporación, que en otros años ha tenido que cerrar estaciones de servicios.
«Esto exige y demanda muchos recursos humanos, materiales, financieros, para poder dar frente a todas estas exigencias y necesidades de nuestra comunidad.
«Tuvimos problemas muy fuertes, también relacionados con el fuerte viento, la sequía y la alta temperatura, que ahora es lo que nos ha mantenido muy a raya y con mucho trabajo aquí dentro de la organización», señaló Zúñiga.
La situación económica de bomberos viene complicándose desde principios de año y es que comparando el primer bimestre de 2021 con el 2022, la atención de siniestros aumentó un 17 por ciento.
Aunque la idea es atender todos los reportes que se generan por parte de la ciudadanía, que causan temor y en muchos de los casos riesgo y peligro para la población, la situación afecta también a los 145 elementos que forman parte de Bomberos y que a veces no tienen las posibilidades de tomar un descanso ni de tomar aire.
Señaló que los equipos de combate sufren deterioro, pues no paran y siguen dando atención a todos los reportes.
«Al aumentar el flujo de necesidades, de siniestros que se dan en nuestra entidad, es obvio que los requerimientos nuestros por parte del área operativo también aumentan y también nuestras unidades sufren un deterioro tremendo porque no paran, son los únicos y con eso tenemos que estarle dando atención a todo lo que se nos presenta», agregó el director de operaciones de Bomberos Nuevo León.
De acuerdo con Zúñiga, en el mayor de los casos los siniestros son en terrenos baldíos y son provocados, por lo que señaló que la ciudadanía puede tomar conciencia y buscar la manera de que la situación no se siga complicando.
«En el mes de marzo, de 800 incendios que se atendieron, 600 fueron en terrenos baldíos, lotes baldíos, en tiraderos de basura que generan un gran problema a nuestro entorno, tres cuartas partes son relacionados con terrenos que no tienen el debido mantenimiento.
«Hay mucho material combustible, pasto seco, maleza, arbustos y ante la más mínima chispa es suficiente para que detone un incendio, son incendios 100% provocados por el hombre, generan mucha preocupación, son incendios que alarman mucho, que son muy difíciles de atender y apagar o extinguir porque demandan muchos recursos de agua.
«Realmente tenemos una contingencia mayor en nuestro estado y debemos estar operando las diferentes labores que hace el gobierno y nosotros también poner nuestro granito de arena para tratar de ahorrar un poco más de agua», agregó Zúñiga.
Asimismo, señaló que las empresas pueden aportar y buscar, prevenir incendios en sus establecimientos, elevando sus medidas de prevención, mantener sus equipos contra incendios al día, preparados y cumpliendo con la normativa.
Además, tener sus brigadas contra incendios preparadas 24/7 y tener mantenimiento en sus equipos y sus procesos las empresas que manejan materia prima peligrosa o altamente peligrosa.