Siguen cayendo las pedreras acusadas de hacer mal uso del agua en Nuevo León y recientemente dos de ellas fueron suspendidas en los municipios de Cerralvo y Lampazos. La primera de ellas fue apuntada por haber utilizado dos pozos de agua que no contaban con las concesiones correspondientes para su explotación, cosa que fue reprendida por el Gobierno Estatal. Puntualmente, se descubrió que la empresa Materiales y Servicios de Cerralvo, S. A. de C. V. tenía un pozo de 15 metros con papalote y otro de más de 30 metros de profundidad con bomba de extracción, ambos sin medidor.
La segunda pedrera, de nombre Extracciones Basáltica S. A. de C. V., ubicada en el norte del estado e inspeccionada por elementos de la de la Procuraduría Estatal del Medio Ambiente, Conagua y Agua y Drenaje de Monterrey, fue suspendida por no contar con permiso de la Federación para extraer agua de dos pozos. Estas no son las primeras pedreras a las cuales el Gobierno les detiene las operaciones, ya que el pasado martes sucedió lo mismo con un yacimiento ubicado en el municipio de Los Ramones. Las autoridades mencionaron que la compañía Triturados y Procesos de Caliza no contaba con la concesión correspondiente para aprovecharse de las aguas superficiales del río Pesquería. Los recorridos de parte de Agua y Drenaje de Monterrey continúan a lo largo del estado, tratando de detectar irregularidades cometidas contra el vital líquido en terrenos, ranchos, empresas y demás propiedades que, de ser encontradas responsables, serán clausuradas o suspendidas.
