La Guardia Costera griega informó ayer que al menos 79 migrantes murieron en el mar Jónico tras el naufragio de un pesquero en el que viajaban “un número indefinido” de personas, y destacó el rescate que hicieron tres naves, entre ellas el yate de una familia mexicana.
Unos 106 migrantes fueron encontrados vivos y en el rescate participó el Mayan Queen IV, yate de una de las familias más ricas de México, la de los Bailléres.
Esta pudiera ser una de las mayores tragedias en las rutas migratorias en alta mar de los últimos años, reporta El País.
La prensa griega ha confirmado que el yate mexicano se encontraba en alta mar —había zarpado del puerto de Nápoles el pasado 7 de junio, según la web de tráfico marítimo vesselfinder.com— en el momento que la llamada de SOS alertó a los navegantes en el mar Jónico.
La Guardia Costera griega confirmó que al menos tres barcos que se encontraban en la zona asistieron a la misión de rescate de los migrantes, entre ellos el yate de los mexicanos.
“Los rescatados fueron recogidos por la tripulación del yate Mayan Queen IV, que navegaba cerca del lugar”, informa el diario digital Dikaiologitika.
Imágenes captadas por agencias, Reuters entre ellas, muestran a decenas de migrantes bajando del yate después del rescate en el puerto griego de Kalamata.
El Mayan Queen IV tiene un valor estimado de 175 millones de dólares y, según el sitio SuperYachtFan “es el yate encarnación del lujo en alta mar”.
Los Baillères poseen la cuarta fortuna más grande de México, según el listado de la revista Forbes, publicado en 2022. Son dueños de Grupo Bal, un conglomerado de siete empresas que van desde la minería hasta grandes almacenes, Palacio de Hierro entre ellos. El cabeza de familia, Alberto Baillères, quien murió en 2022.